El 7 de abril es el Día Mundial de la Salud, y la OMS pide a los líderes mundiales que se comprometan a adoptar medidas concretas para promover la salud de todas las personas.
La cobertura sanitaria universal (CSU) se logra cuando existe una firme determinación política. Ello significa garantizar que todas las personas, en cualquier lugar, puedan tener acceso a servicios de salud esenciales y de calidad sin tener que pasar apuros económicos.
Los países que invierten en la CSU realizan una importante inversión en su capital humano. En los últimos decenios, la CSU ha surgido como una estrategia clave para avanzar hacia la consecución de otros objetivos relacionados con la salud y de desarrollo más amplios.
La Organización Mundial de la Salud se fundó sobre la base del principio de que todas las personas deberían poder hacer efectivo su derecho al grado máximo de salud que se pueda lograr.
Por lo tanto, la “Salud para todos” ha sido la visión que ha servido de guía a lo largo de más de siete decenios. También es el motor de la actual iniciativa impulsada a nivel de toda la Organización de ayudar a los países a avanzar hacia la cobertura sanitaria universal (CSU).
Así pues, en este año en que celebra el septuagésimo aniversario de la OMS, ésta hace una petición a los líderes mundiales que respeten los compromisos que contrajeron cuando acordaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible en 2015, y que se comprometan a adoptar medidas concretas para promover la salud de todas las personas. Ello significa garantizar que todas las personas, en cualquier lugar, puedan tener acceso a servicios de salud esenciales y de calidad sin tener que pasar apuros económicos.