Una situación análoga se puede dar cuando el trabajador sale a comer. Este tipo de accidentes se basa en el supuesto de que, si no hubiera tenido que ir a trabajar no se habría producido la lesión, por lo que, si el trabajador tiene que volver a su puesto de trabajo, y no media temeridad en su conducta, se mantiene una causalidad entre el trabajo y el accidente y sí se consideraría accidente laboral “in itinere”.
Hay 3 elementos que se requieren en un accidente in itinere:
- Que ocurra en el camino de ida o vuelta.
- Que no se produzcan interrupciones entre el trabajo y el accidente.
- Que se emplee el itinerario habitual.
Sin embargo, no se considerará “in itinere” cuando la ausencia sea muy larga, o si se sale del puesto laboral a una hora que no corresponde.