Estrategia Gallega Reduce Radón
El pasado 7 de noviembre, Día Europeo del Radón, se presentó la Estrategia Gallega Reduce Radón.
La Estrategia gallega Reduce Radón se estructura en cinco ejes estratégicos para conseguir una Galicia menos expuesta a niveles de radón en los ambientes interiores.
El primer eje busca identificar los niveles de radón en lugares y áreas de Galicia, de modo que se puedan saber las áreas en las que existe una mayor probabilidad de encontrar altas concentraciones de radón en edificaciones, para facilitar el diseño de la protección a nivel colectivo. Durante la vigencia del plan, la Xunta medirá los niveles del radón en centros sanitarios, educativos, sociosanitarios y fomentará la medición en los hogares y centros de trabajo privados.
El segundo eje de acción está orientado a la vigilancia epidemiológica y de la salud, que servirá para orientar con mayor eficacia a prevención de los riesgos para la salud asociados a la exposición a niveles de radón, así como realizar la planificación y evaluación sanitaria. Con este objetivo, se implantará un sistema sencillo de recogida de información sobre exposición al radón para que sea incorporada a la carpeta personal y a la historia clínica electrónica única de cada paciente de la sanidad pública gallega.
El tercero eje busca conseguir una buena gestión del conocimiento de los efectos de la exposición al radón en la salud de la población para conseguir la integración de los diversos sectores involucrados con vistas a obtener soluciones integrales y que estas sean las mejores soluciones posibles. En este sentido, la Xunta impulsará la investigación interdisciplinar de excelencia entre la salud pública y otras áreas de conocimiento, en colaboración con las universidades gallegas. Además, se desarrollará un plan de formación de agentes que intervienen en el ámbito de la edificación, del arrendamiento o de la prevención de riesgos laborales.
La cuarta línea de acción está enfocada a conseguir una comunicación eficaz y clara para los profesionales y la población para conseguir el apoderamiento para la salud de las personas a título individual y de las comunidades. En la práctica, se diseñará un plan de comunicación e información sobre los riesgos para la salud de la exposición al radón, así como la elaboración de guías para reducir la exposición a los niveles de radón en los edificios existentes.
El quinto eje se centra en la gestión del riesgo de la exposición al radón en la población gallega. Se creará una comisión interdepartamental, adscrita a la Dirección General de Salud Pública, para coordinar e impulsar las políticas públicas en relación al gas radón. También está previsto crear la Oficina técnica de control del radón para, poner en marcha y desarrollar todas las acciones indicadas en esta estrategia.
Uno de los principios rectores de esta estrategia es el enfoque en salud en todas las políticas, ya que para conseguir la merma de los niveles de radón en los ambientes interiores es necesario tomar medidas y decisiones, no solo sanitarias, sino también en los ámbitos de la vivienda y del urbanismo, de las infraestructuras, del empleo, de la política social, de la educación, etc.